sábado, 2 de enero de 2021

Cáncer de alma

 

A ti, ser que siempre vuelve a mi vida con dolor, a ti, que nunca terminas de irte ni de quedarte, a todos los recuerdos que componen tu existencia y a todo el dolor que supone en mi vida tu presencia.


Cáncer de alma


A veces cuando escucho canciones, diferentes canciones, siempre escucho miles de mensajes que alguna vez te dije, que alguna vez quise escucharte decir, que alguna vez debería decirte, que quizás nunca escuches de mí. Nos hemos despedido infinitas veces, en el fondo de mi corazón siempre guardando la esperanza de tu regreso, regreso que se da, regreso que no debería desear más.


Cada vez que apareces vuelven contigo las mentiras, vuelve el dolor, la amargura y las sensaciones de debilidad, derrota, desgracia, vuelven los recuerdos que me matan y me queman, igual que antaño me quemaban las quimioterapias en mis venas, eres como un cáncer, ya enfrenté el cáncer de sangre, tú eres un cáncer de alma, me carcomes los sentimientos y me matas las esperanzas, los sueños, las fuerzas, combatirte me debilita, me empequeñece, me hace vulnerable a todo lo que me rodea, pero si ya gané una vez ¿Quién dice que no puedo hacerlo dos veces? 


Nunca antes había podido dar con una definición tan clara de lo que eres, cuando mi corazón te amaba incondicionalmente te llamó "inefable", hoy, que mi corazón dolido se rehúsa a seguir llamándote amor, puedo llamarte cáncer, siempre supe que el cáncer estaría en mi vida, pero entre tú y yo, prefiero el que nacía en mi columna e infectaba mis torrentes sanguíneos, que el que tú provocas con existir cerca mío. La cura a este cáncer es tu adiós, tu definitiva extinción de mi vida, mi memoria y mi corazón, nunca antes sentí que tendría la fortaleza de decidirlo pero no sabes cuánta paz me provoca pensar en desaparecerte a ti, a tus recuerdos, a tu familia y a tu constante presencia de mi vida, veo la paz, la libertad y un motivo para vivir esa vida que tanto he amado y deseado.


No sabes cuántas veces he sabido lo corrupto que está tu ser y al verte nuevamente de esta manera y poder definirte en mi vida, sé que lo que siempre temía es todo lo que hay, y qué, para bien o para mal, no puedo seguir negando la verdad de mis temores y aún causándome terrible aflicción, he de admitir que aceptar mis miedos es abrir también mi alma a la salvación misma. No podemos estar juntos nunca más, ni en un año, ni en 20, ni en 50, ni en la otra vida, porque simple y sencillamente nunca fue el destino el que estuviéramos juntos y, el intentar perdonarte y darte un espacio en mi corazón, sólo me deteriora, me mata y me consume, haciendo más evidente cuán necesario es para mi existir desprenderse de ti. 


Quiero vivir sin recordarte y sin recordar las cosas malas que me has causado, porque al igual que el cáncer que un día sufrí, recordarte es limitarme, las secuelas que me dejas podrían arruinarme, destrozar mi espíritu y envilecer ni proceder, pero no, no puedo permitirlo, mi corazón carece de crueldad, incluso para el cáncer que eres en mi vida, mi alma sólo desea vivir tranquila y la cura es olvidar las limitaciones que me causas, al igual que olvidé las que la leucemia me dio, al igual que sigo luchando cada día, esforzándome con orgullo. La vida que me han otorgado está llena de virtud y es mi deber vivirla con el mayor amor a mi existir, por quienes no pudieron llegar aquí, por quienes no pudieron verme crecer, por quienes no he podido conocer aún, pero nunca jamás por ti. 


Siempre he tenido la cura a la enfermedad de tu presencia, de tus recuerdos y existencia, la cura siempre fue desvestirte de los infinitos ropajes de amor que te he cubierto, arrancarte los antifaces que te he regalado y despojarte de las expectativas que claramente nunca podrás cumplir, ni para ti, ni para mí, convertirte en el humilde y carente ser que siempre fuiste, develando lo retorcido de tu vivir y siguiendo mi camino sin ningún lazo que me una a ti, sin ningún camino que te traiga a mí, porque ya no quiero que me encuentres, porque ya no quiero abrirte las puertas, porque yo no puedo perdonarte, porque olvidarte es mi mayor castigo. 



Aran Nilo


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4 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Mil gracias por siempre estar aquí, por dedicarle un momento a mis versos~ mil abrazos

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  2. Siempre quice preguntar ¿eso son tu sentimiento?

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    Respuestas
    1. Claramente~ como bien me gusta decir, es lo más profundo de mis sentimientos y la pasión misma de mis pensamientos~ espero que lo disfrutes

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